Ser soltero hoy en día puede ser muy traumático debido a las continuas burlas que reciben aquellas personas que todavía no han conseguido su media naranja. Si todavía no has conseguido a tu príncipe azul o a tu princesa, tranquilo(a), lo mejor está por venir. Dios te quiere enseñar y preparar para lo que viene.
¿Qué es la soltería?
Según Wikipedía, la soltería es el estado civil, con reconocimiento legal, en la que se encuentra aquella persona que no ha contraído matrimonio
Si estás soltero o soltera, debes saber que tienes un gran privilegio. El apóstol Pablo dice en 1 de Corintios 7:32
“El soltero tiene cuidado de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor”
¿Te das cuenta? El soltero puede agradar al Señor viviendo para Él. Anímate, hay muchos beneficios para el soltero.
Veamos algunas bendiciones de la soltería:
El soltero tiene la ventaja de poder decidir con quién se va a casar
Muchas personas han fracasado en sus relaciones de pareja por la sencilla razón de elegir a la persona incorrecta. Después de un tiempo, muchas parejas ven el matrimonio como un callejón sin salida. El soltero puedo elegir correctamente a su pareja para evitar frustraciones en el futuro.
El soltero tiene tiempo para dedicarse a sus asuntos personales
Muchas personas hoy en día sueñan con tener una buena profesión y con alcanzar logros personales. No hay mejor etapa para cumplir esas metas que la soltería, y las razones son muy sencillas: sólo tienes tiempo para ti y para Dios, no hay otra persona que te quite el tiempo. Cuando se está en una relación de noviazgo o cuando se está casado, ya la persona no puede tener únicamente tiempo para él, pues las otras obligaciones merecen también ser atendidas. Es por eso que la soltería es una bendición, ya que puedes planificar con la cabeza fresca y con todo el tiempo posible.
El soltero tiene tiempo para dedicarse con más entrega a la obra del Señor.
Este es uno de los mejores beneficios de la soltería. El joven o la chica soltera tienen el privilegio de entregarse por completo al trabajo de la obra del Señor. Esto no quiere decir que los casados no lo puedan hacer, pero la gran diferencia radica en el tiempo y en las oportunidades. El casado se debe a Dios y a su familia, mientras que el soltero se debe a Dios y a él mismo. Es por eso que Pablo dice: “El soltero tiene cuidado de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor; pero el casado tiene cuidado de las cosas del mundo, de cómo agradar a su mujer” 1 Corintios 7:32-33.
¿QUÉ DEBO HACER MIENTRAS ESTOY SOLTERO?
Debes preocuparte más por Dios que por cualquier otra cosa.
Si tienes planes de establecer un noviazgo o un futuro matrimonio, debes aprender a elegir pareja a la luz de la Biblia. Recuerda que una mala decisión se paga caro.
Trata de involucrarte lo más que pueda en la obra de Dios. El Señor te recompensará en gran manera.
Trata de aprovechar tu tiempo de soltero(a) para alcanzar tus logros personales y profesionales. No hay nada más incomodo que hacerlo durante el matrimonio.
Espera en Dios, las malas decisiones pueden marcarte para toda tu vida.
Pídele dirección a Dios en cuanto a tus impulsos sexuales. La soltería es la mejor etapa para ejercer dominio propio, de hecho, Dios creó la soltería para ese fin: preparar a las personas en el carácter cristiano y en el dominio propio.
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