Las Enfermedades del Alma

LAS ENFERMEDADES DEL ALMA
Clase I. VENCIENDO LA ANSIEDAD. PARTE I
Por: EIVERT CARIDAD
Texto bíblico: 1ra de Pedro 5:7


“Echando toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros.”


Introducción:
Para tomar en cuenta: Comienza la clase contando algunos testimonios sobre situaciones difíciles por las cuales hayas pasado. (Recuerda que los testimonios son sobre situaciones difíciles). Luego realiza la siguiente pregunta: ¿Dios se preocupa de nosotros sólo cuando nos ocurre cosas buenas, o Él también está presente en medio de nuestras dificultades?

1. ¿QUÉ ES LA ANSIEDAD?
Es un estado emocional de inquietud, miedo y perturbación. Angustia que suele acompañar a muchas enfermedades.


LA ANSIEDAD ES UNA DE LAS ENFERMEDADES DEL ALMA, LA CUAL ES UTILIZADA POR EL ENEMIGO PARA SEMBRAR ANGUSTIA EN LOS CREYENTES.


2. EXPLICANDO LA ANSIEDAD DESDE UNA PERSPECTIVA BÍBLICA.
“Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti; aparta de mí esta copa; mas no lo que yo quiero, sino lo que tú quiera.” Marcos 14:36
En el pasaje anterior, Jesús, el Hijo de Dios, estaba pasando por la situación más difícil de toda su vida, a tal punto, que oró tres veces para que Dios pasara la copa. Sin embargo, Él nunca huyó del problema, sino que en oración le entregó a Dios Padre toda su angustia.


¿Qué tenemos que hacer cuando estemos frente a una situación difícil y angustiosa?
Seguir el ejemplo de Jesús, y Dios Padre se compromete a traer refrigerio a tu alma angustiada.
La oración que Jesús hizo en Getsemaní, es la clave para vencer la ansiedad. Dicha oración consta de tres partes. Marcos 14:36


a. Reconocer el poder de Dios para sacarnos del problema. “Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti”


Cuando reconocemos que Dios es Todopoderoso, y que es capaz de librarnos de toda ansiedad, entonces nuestra perspectiva del problema cambia radicalmente.


b. Petición por el problema. “ aparta de mí esta copa”


Nunca debemos callarnos en medio del problema, siempre debemos orar a Dios para que Él intervenga a nuestro favor


c. Dejar que Dios haga su voluntad por encima de la nuestra. “mas no lo que yo quiero, sino lo que tú quieras”


Esta parte de la oración es vital para recibir el bálsamo de su paz, pues, al entregarle a Dios nuestro problema y al permitirle que haga su voluntad, entonces podemos estar tranquilos, ya que su voluntad es mejor que la nuestra.
Si estás pasando por un problema que te tiene ansioso, angustiado y perturbado, recuerda que Dios está contigo. No permitas que el diablo siembre en tu alma la semilla de la ansiedad.


Para meditar:


• Echando toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros. (1ra de Pedro 5:7)
• Echa sobre el SEÑOR tu carga, y Él te sustentará; Él nunca permitirá que el justo sea sacudido. (Salmo 55:22)
• Por eso os digo, no os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o qué beberéis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa? (Mateo 6:25)